Biografia:
Eduardo Darnauchans nació el 15 de noviembre de 1953 en Montevideo. Su infancia y adolescencia transcurrieron al norte del país, primero en Minas de Corrales (Rivera), y luego en la ciudad de Tacuarembó.
A los 18 años registra su primer larga duración titulado "Canción de muchacho", que concita la atención de colegas y críticos por sus cualidades como cantor y compositor.
Su segundo larga duración titulado "Las Quemas" es editado en 1975.
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Outras músicas:
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- Balada Para Una Mujer Flaca
- Buenas Noches
- Como Los Desconsolados
- De Corrales A Tranqueras
- Desconsolados 2
- Dicen Los Cantores
- El Angel Azul
- El Instrumento
- El Nudo Desatado
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- Flash
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- Los Reflejos
- Memorias De Cecilia
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- Milonga De Manuel Flores
- Nadie
- Ni Siquiera Las Flores
- Nieblas Y Neblinas
Quatro anos de trabalho duro!Neste mês de maio fizemos quatro anos no ar. Continuamos trabalhando na divulgação deste maravilhoso instrumento, obrigado por participar da nossa história!
G D C G
Nosotros vinimos cantando los días,
D C
dejamos el cielo y las restas del aire.
Am C G
Nosotros cantamos las cosas del mundo,
D C G
los vivos, los muertos y el hombre y su viaje.
La altísima lluvia no sabe su pena,
no incluye alegría la roja manzana:
lloramos nosotros el agua y las nubes,
ponemos la risa después de la rama.
RECITADO:
No hay sólo silencio en el mismo silencio:
existe la antigua canción de las horas
que cantan los tiempos desde antes del fuego
y vamos diciéndola con nuestra sombra.
Nacimos un año sin claros violines,
o solamente con el violín del llanto.
Y no nos morimos sobre un escenario:
la gente no muere de acuerdo al teatro.
Nosotros sangramos, nosotros seguimos
tocando silencios, silbamos de espanto.
Pusimos nosotros el trigo en la noche
y luz en la íntima luz del celdario.
Nosotros vinimos cantando los días,
dejamos el cielo y las restas del aire.
Nosotros cantamos las cosas del mundo,
los vivos, los muertos y el hombre y su viaje.
(Nota: la letra la saqué de oído, así que puede
haber alguna que otra palabra mal transcripta)
Nosotros vinimos cantando los días,
D C
dejamos el cielo y las restas del aire.
Am C G
Nosotros cantamos las cosas del mundo,
D C G
los vivos, los muertos y el hombre y su viaje.
La altísima lluvia no sabe su pena,
no incluye alegría la roja manzana:
lloramos nosotros el agua y las nubes,
ponemos la risa después de la rama.
RECITADO:
No hay sólo silencio en el mismo silencio:
existe la antigua canción de las horas
que cantan los tiempos desde antes del fuego
y vamos diciéndola con nuestra sombra.
Nacimos un año sin claros violines,
o solamente con el violín del llanto.
Y no nos morimos sobre un escenario:
la gente no muere de acuerdo al teatro.
Nosotros sangramos, nosotros seguimos
tocando silencios, silbamos de espanto.
Pusimos nosotros el trigo en la noche
y luz en la íntima luz del celdario.
Nosotros vinimos cantando los días,
dejamos el cielo y las restas del aire.
Nosotros cantamos las cosas del mundo,
los vivos, los muertos y el hombre y su viaje.
(Nota: la letra la saqué de oído, así que puede
haber alguna que otra palabra mal transcripta)
Eduardo Meana
Eduardo Osorio
Eduardo Peralta
Eduardo Rodrigo
Eduardo Santoro